El Museo Nacional de la Ciencia y la Técnica de Cataluña (MNACTEC) ha incorporado a sus colecciones una cabina telefónica de la década de los años 2000. El objeto, que prestó servicio en la población de Santa Bàrbara (Montsià), ha sido dado al Museo por la compañía Telefónica de España.
La cabina es el modelo Garza con puertas simétricas, fabricado por la empresa Garza-Diviloc, y que fue el último modelo de cabina telefónica que se fabricó en el Estado. Tiene unas medidas de 243,5 cm de altura, 91,5 cm de fondos y 112,5 cm de anchura.
Con esta adquisición, el MNACTEC quiere conservar a sus colecciones un testigo importante del desarrollo tecnológico del servicio de telefonía a nuestro país durante la segunda mitad del siglo XX, que supuso una revolución de las telecomunicaciones y que hoy en día ya ha prácticamente desaparecido por la aparición de la telefonía móvil.
Cabinas telefónicas
Una cabina telefónica es una caseta en el interior de la cual hay un teléfono público. El inventor de la cabina fue el norteamericano William Gray, que recibió la patente por su aparato en 1889.
Las primeras cabinas del Estado español, formadas por un cubicle de aluminio y vidrio con un teléfono público adentro, se instalaron a mediados de los años 60 a las vías públicas de ciudades como Madrid y Barcelona, aunque no se generalizaron hasta finales de la misma década.
El año 1999, al poco de la aparición masiva de la telefonía móvil, había cerca de 67.000 cabinas en el Estado español. El año 2020 ya solo quedaban unas 15.000, que registraban una media de una llamada en la semana. El mismo año 2020 las cabinas dejaron de ser consideradas parte del servicio universal de telecomunicaciones del Estado y se empezó la retirada de la vía pública.